Enfermedad Inflamatoria Pélvica

Factores de Riesgo de Riesgo o Favorecedores de la E.I.P

  1. Parto o aborto espontáneo. 
  2. Procederes invasivos en el aparato genital (aborto provocado, regulación menstrual, histerosalpingografia, insuflación tubárica, histerometria, legrado diagnóstico, colocación de DIU y su retiro, duchas vaginales y operaciones sobre cuello uterino) 
  3. Edad y promiscuidad sexual. 
  4. Bajo nivel socioeconómico. 
  5. E.I.P.A previa. 

Los factores enunciados se explican por si solos, pero creemos oportuno mencionar algunos de ellos. 

La E.I.P.A es significativamente más frecuente por debajo de los 30 años y el riesgo es especialmente elevado en adolescentes .Esto se ha relacionado con un mayor grado de promiscuidad sexual en edades jóvenes. (3, 4, 5,9) 

El DIU aumenta el riesgo de E.I.P.A y especialmente un nulíparas, hecho que se atribuye a una mayor incidencia de promiscuidad sexual en las nulíparas .Como mecanismos de infección se señalan el arrastre de gérmenes al colocar el dispositivo (proceder invasivo) la inflamación estéril del endometrio y las trompas que esto origina y la presencia del hilo en el canal cervicovaginal. 

Los contraceptivos orales pueden reducir el riesgo de E.I.P.A clínicamente manifiesta y su severidad esta acción protectora se presenta solo a partir de los 12 meses de su ingesta y haberlos tomado no protege. Sin embargo la salpingitis silenciosa aparece con mayor frecuencia en las mujeres que usan contraceptivos orales los cuales aumentan la incidencia de ectopias cervicales y ello facilita la infección por Clamidia, que infecta selectivamente las células columnares más que las escamosas ectocervicales. 

Los métodos de barrera por un mecanismo de actuación mecánica, y los espermicidas por su posible acción bactericida reducen la incidencia de enfermedades de transmisión sexual y de la E.I.P.A. 

El riesgo de E.I.P.A, al practicar una interrupción de la gestación aumenta con el tiempo de amenorrea y según la técnica usada, siendo mayor el riesgo con dilatación y raspado que con la aspiración. 

Un riesgo de 2-3 veces mayor para presentar un nuevo episodio lo representa la E.I.P.A anterior. (9, 20,23) 

Diagnóstico de la E.I.P.A

La paciente generalmente acude al médico, refiriendo dolor en bajo vientre, fiebre que se puede acompañar de escalofríos y leucorrea purulenta y /o fétida. 

Al interrogatorio podemos recoger con gran frecuencia alguno de los siguientes antecedentes: Procederes invasivos del aparato genital, un parto o aborto espontáneo o una E.I.P.A previa. (7,10) 

Al examen físico podemos encontrar a la palpación del abdomen y examen ginecológico así como en los resultados de complementarios y algunos medios 3 de los siguientes síntomas: 

A) Dolor espontáneo a la palpación en hipogastrio. 

B) Signos de irritación peritoneal. 

C) Presencia de leucorrea purulenta y/ o fétida. 

D) Dolor a la movilización cervical. 

E) Dolor anexial. 

F) Temperatura mayor de 38 C. 

2-Presencia de al menos 2 de los siguientes datos: 

1) Leucocitosis superior a 10.000 

2) Eritosidimentacion mayor a 50, mm /h 

3) Masas anexiales inflamatorias (por examen ginecológico, ultrasonografía o laparoscopia) 

4) Obtención del líquido purulento por punción abdominal o del Douglas. 

5) Test de Gram. O clamidias: positivo (12, 15,17). 

Si se establece el diagnóstico de E.I.P.A podemos clasificar la enfermedad en el estadio en que se encuentra. 

Estadios de la E.I.P.A

Estadio I: Salpingitis aguda sin pelvi peritonitis. 

Estadio II: Salpingitis aguda con pelvi peritonitis. 

Estadio III: Salpingitis con formación de absceso tubo ovárico. 

Estadio IV: Rotura de abscesos tubáricos. 

El estadio en que se encuentra la E.I.P.A en ocasiones es muy difícil de precisar por la clínica, debido a la dificultad de obtener datos por el tacto vaginoabdominal en una paciente que puede presentar una pelvi peritonitis aguda. 

Cuando se sospecha una E.I.P.A aguda los criterios clínicos clásicos de dolor pélvico y anexial fiebre, flujo, eritro acelerada y leucocitosis y realizamos una laparoscopia, se comprueba que solo el 65 % tienen una E.I.P.A un 20% de las pacientes no presentan patología pélvica alguna y el 15 % tienen otros problemas patológicos (patologías urológicas, apendicitis aguda, embarazo ectópico, endometriosis, cuerpo luteo hemorrágico o torsión de quistes de ovarios). 

La ecografía puede resultar un medio diagnóstico complementario de gran utilidad pues puede informarnos del estadio de la enfermedad porque nos puede diferenciar un absceso tubárico de una salpingitis aguda con adherencia intestinal a los anejos. 

En el absceso tuboovárico el examen ecográfico revela la presencia de una masa pélvica de diferentes dimensiones ,siendo las más frecuentes las de diámetros inferiores a 5 cm las masas pélvicas de más de 8cm de diámetro se presentan en los cuadros más graves e indican que puede producirse la rotura del absceso o existe una pelvis congelada ,en cerca de la mitad de las pacientes con absceso tubo ovárico la ecografía puede revelar en el fondo del saco de Douglas la presencia de líquido finamente ecogénico sugestivo de colección purulenta. 

La laparoscopia es posiblemente el medio de diagnóstico más importante en la E.I.P.A además se puede utilizar para recoger muestras para cultivo y para Procederes terapéuticos. No obstante cuando nos dan el diagnóstico de salpingitis aguda y no se observa el trasudado, el diagnóstico hay que tomarlo con reservas. 

La Cintigrafía con leucocitos antólogos radioactivos y la TAC son medios auxiliares muy útiles para el diagnóstico de absceso tuboovárico, pero no se ha podido demostrar que superen el examen ginecológico, la ecografía y la laparoscopia. (7, 11, 13,16) 

Profilaxis de la E.I.P.A. 

No cabe duda que las bases para la E.I.P.A están dadas por una buena atención ginecológica, evitar los Procederes invasivos en el aparato genital educar sexualmente a la población. (14) 

Tratamiento de la E.I.P.A. 

Los únicos pacientes que pueden hacer tratamiento ambulatorio son las que presentan el estadio I y II de, la enfermedad a excepción de las adolescentes. 

Toda paciente con el diagnóstico de E.I.P.A en estadio III, y IV deben ser hospitalizadas en centros que cuenten con servicios de ginecología. 

Al ingreso pueden indicarse los siguientes complementarios: 

  1. Serología y VIH
  2. Hemograma con diferencial. 
  3. Eristrosedimentación: al ingreso y después cada 3-5 días. 
  4. Parcial de orina. 
  5. Exudado de vaginal simple y cultivo. 
  6. Test de Gram. 
  7. Ultrasonido ginecológico al ingreso y después de cada 7 días. 
  8. Laparoscopia en los casos con dudas diagnósticas. 
  9. 9. Laparoscopia en caso de E.I.P.A. en estadio IV. (16) 

Medidas Generales 

  1. Reposo en posición semisentada 
  2. Bolsa de hielo en hipogástrico (no es imprescindible). 
  3. La dieta será de acuerdo al estado de la paciente y si tiene o no vómitos. 
  4. Si anemia, debe ser corregida de acuerdo a su intensidad. 
  5. Vigilar hidratación y aporte de electrolitos. 
  6. Vigilar la evolución de la enfermedad por tacto vaginal cada 5 días ultrasonido cada 7 días y eritrocedimentación cada 3-5 días. 

Medicación Sintomática: 

  1. Analgésicos: Dipirona (600 Mg.), c/ 8 horas o 1 tableta (300 Mg.) c/8hrs. 
  2. Sedantes e Hipnóticos: Diazepam (5mg) 1 tableta c/8hrs .Puede usarse cualquier tipo de sedante o hipnótico.

Edwin Alberto Salinas Velasco

Médico, Cirujano General Clínica de la Costa Barranquilla drsalinas82@gmail.com

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